El sentimiento más poderoso del mundo. Aquel que atrae hacia cualquier ser vivo la esencia de lo necesario. El vínculo de unión entre todos y todas las cosas.
Creía conocerlo bien. No imaginaba poder hallarlo de un modo más intenso y certero.
En la mirada de un padre, el abrazo de una madre, el cariño de un hermano, la complicidad de una mujer, el compadreo de un amigo.
Creía conocerlo bien, en todo su esplendor.
Hasta el día en el que te conocí... Y compartí contigo la mirada, el abrazo, el cariño, la complicidad y el compadreo. El día que te vi reflejado en mis ojos y me vi reflejado en los tuyos. En nuestras almas.
Hijo mío; creía conocer bien el amor, pero ahora ya no lo creo...
... Ahora se de veras lo que es.
Fin
Hermoso y entrañable post. El amor materno o paterno-filial es incomparable a cualquier otro. Es AMOR. Así, en mayúsculas.
ResponderEliminarUn abrazo y disfruta de ese amor incomensurable.
AMOR en mayúsculas, sí señor.
EliminarMuchas gracias por tu lectura y sentido comentario, Josep Mª.
¡Abrazo, Compañero!
Maravilloso tu relato el amor por un hijo es lo mas grande. Un abrazo
ResponderEliminarYo así lo creo.
EliminarMuchas gracias, María del Carmen.
¡Abrazo!
Genial relato, el amor a los hijos es indescriptible, y mira que a veces te dan ganas de salir corriendo, jejeje.
ResponderEliminarUn besillo.
P.D. No había visto tu nueva versión del Blog, me encanta.
jajajaja... ¡Ya te digo!
EliminarMuchas gracias, María.
¡Besillos, Hermana de Letra! ;)
...Y es que ser padre es tan grande como ser madre, y experimentas sensaciones que nunca pensaste ibas a sentir.
ResponderEliminarToda una aventura.
Un abrazo.
Nada puedo añadir a tus certeras palabras.
EliminarMuchas gracias, Francisco.
¡Abrazo, Hermano!
Qué placer volver a tener textos tuyos que llevarse a la vista y, en este caso, también al corazón :)) Absolutamente precioso, Edgar, has descrito de una manera tan sencilla como profunda un sentimiento que no tiene posible comparación.
ResponderEliminarMe ha encantado esta frase: "El sentimiento más poderoso del mundo. Aquel que atrae hacía cualquier ser vivo la esencia de lo necesario". Me parece absolutamente genial, compi. La esencia de lo necesario, de lo que cada uno precisa para estar completo y poder ser...
¡Un fuerte abrazo de lunes, ojalá que tu semana sea genial!
Qué placer tenerte a ti por aquí de nuevo y leer uno de tus sentidos y grandes comentarios.
EliminarA mí también me gusta esa frase.
Muchas gracias, Julia.
¡Abrazo enorme, querida Compañera, y feliz semana! ;)
Sólo un padre o una madre puede entenderlo. Ese amor incondicional y a prueba de balas que se le tiene a nuestros engendritos XD. Hermoso Edguitar. Besito desde la 707.
ResponderEliminarTal que así...
EliminarMe ha encantado lo de "engendritos", muy Mendiel.
Muchas gracias, Compañera.
¡Besito desde la 237! ;)
Hermoso!!!
ResponderEliminarMuchas gracias, Mónica.
EliminarMe alegra que así te lo parezca.
¡Abrazo!
Wow. Nada que decir, tan solo: ¡Qué bonito, Edgar!
ResponderEliminarUn abrazote.
Para mi placer, más que suficiente.
EliminarMuchas gracias, Sue.
¡Abrazote!
Sin duda, un sentimiento mayúsculo! Grande!
ResponderEliminarMuchas gracias, Miguel Ángel.
EliminarSentimiento mayúsculo, sí señor.
¡Abrazo!
No soy madre pero comprendo que el amor tanto de los padres a los hijos o viceversa, es algo que no cabe en el pecho ni puede expresarse en palabras.
ResponderEliminarTe ha quedado muy bello, Edgar
¡Un abrazo y suerte!
Así es, Estrella, un amor indescriptible.
EliminarMuchas gracias, compañera.
¡Abrazo!
El amor a un hijo es inexplicable, no hay nada comparable, AMOR, así en mayúsculas. Tú lo has explicado perfectamente. Saludos.
ResponderEliminarDesde luego, Jose, incomparable.
EliminarMuchas gracias, compañero.
¡Saludos!
Qué belleza de sentimiento es el amor a nuestros hijos, es el que nace de, laa entrañas y se apodera de cada segundo de nuestras vidas a partir del momento en que sabemos que ya existe su presencia. Ha sido un real gusto conocer tus letras a partir de este relato.
ResponderEliminarFelicidades por ese sentimiento.
Bendiciones.
Un real gusto tu comentario, ciertas y bellas palabras.
EliminarMuchas gracias y bienvenida al Rincón, Viviana.
Felicitaciones compartidas.
¡Bendiciones, compañera!
No se puede decir nada más que Bello a ese amor sin condiciones. Hermoso relato.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias por tus palabras, Mariola.
EliminarSaludos, compañera. ;)
Realmente precioso. Tienes el mérito de haber conseguido enternecer a un bastardo sanguinario como yo, ¡felicidades! Mucha suerte en el concurso!
ResponderEliminarjjajajaja... Pues me alegra haber tocado la fibra de un ser de tu índole.
EliminarMuchas gracias, Artza.
Saludos.
Hermoso relato Edgar, muy enternecedor. Éxitos y bendiciones!
ResponderEliminarMe alegra que así te lo parezca.
EliminarMuchas gracias, Mery.
¡Abrazo, Compañera!
Un breve canto al Amor, con tu bella prosa y medidas frases cargadas de sentimiento. Un final precioso.
ResponderEliminarUn abrazo, Compañero.
Tu comentario me anima, Ricardo.
Eliminar¡Muchas gracias y un gran abrazo, Compañero!
Hermoso en su sencillez compañero. Muy merecido ese Oro.
ResponderEliminarAbrazos!! :)
Mil gracias, Diana.
EliminarHermoso y sencillo, dos calificativos que me honran.
¡Abrazo, CumpleCompañera! ;)
Bello relato, amigo. Felicidades por el Oro que consigues con él y, sobre todo, por aquel que es la causa de tus palabras.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias, Bruno.
EliminarSin duda, los causantes de estas letras son los auténticos premios y premiados.
¡Saludos!
¡Enhorabuena! Edgar por este primer premio, que con tus sencillas letras fuiste capaz de llenarnos el corazón de puro amor.
ResponderEliminar¡A disfrutarlo y a sumar nuevos éxtos!
¡Un gran abrazo!
Muchísimas gracias, Estrella.
Eliminar¡Gran abrazo, Compañera! ;)
Qué preciosidad Edgar, bonito, bonito.
ResponderEliminarMe has conmovido, :)
Enhorabuena!
¡Un fuerte abrazo!
Me alegra haberte conmovido, Irene.
ResponderEliminar¡Muchas gracias y un fuerte abrazo, amiga de letras! ;)